Por: Camila Hassan
Donde el tango nos llevó se presenta los sábados desde el 25 de marzo y hasta el 15 de abril, a las 20.00 hs, en el Teatro Regina. El music hall tiene como eje el ritmo del 2X4 y fusiona danza jazz, contemporánea, electrónica y tap.
Con catorce artistas en escena, el espectáculo no escatima en talento. Las voces de los cantantes son tan atrapantes como renovadoras y permiten que este ritmo se haga presente sin perder vigencia. La milonga se acerca a todas las generaciones y nos cuenta nuestra propia historia. Durante el show se abre paso a una nueva historia: la actual, que trasciende las barreras etarias mientras las canciones más icónicas están presentes en la cotidianeidad.
“Las callecitas de Buenos Aires tienen ese qué sé yo”, inmortalizó Piazzolla hace más de cincuenta años. El espectáculo invita a revivir esa retórica y no es casualidad que la obra se desarrolle en Avenida Santa Fe 1235. En la sala, la realidad supera la ficción: un “Se dice de mí” ligado a las redes sociales y a los prejuicios que se buscan deconstruir, un “Cambalache” que nos muestra las pasiones de la argentinidad, o bien la “Nostalgia” visible en algún café de la esquina.
En este marco no sólo se destaca la interpretación e historia que se cuenta. Bajo la dirección de Tomás Luna y Juan Pablo Ragonese, se acentúa el concepto de artista integral y se combinan diversos tipos de danzas sin perder la emocionalidad que el grupo transmite.
La intención de esta reseña no es quitar la sorpresa del espectador, pero sí cabe destacar que un musical de Gloria Gaynor en versión arrabalera, no se vive todos los días.
Asimismo, Ragonese habló del tango como protagonista de nuestras raíces y destacó que “cuando uno vibra en teatro, se tienen grandes sueños y nosotros trabajamos arduamente para cumplirlos, coyuntural en el arte independiente. Siempre prima el mantener viva la cultura de un pueblo, por eso brindamos nuestro granito de arena”, agregó el director vocal.
Por su parte, la actual protagonista de Drácula El musical, Florencia Regina, participó del público y consideró que “es un espacio con mucha juventud y fuerza”. La cantante y actriz destacó la labor en las coreografías y el “impresionante” trabajo coral, además de las
“extraordinarias” voces de los solistas. “Hablamos de un género bellísimo y profundo sobre temas universales: desamor, corrupción, dolor, duelo, vejez y juventud. Cuestiones con relevancia siempre vigente”, concluyó.
“El tango se baila entre hombres”, solía escucharse. Esa versión rememora a la antigüedad, en esta experiencia se danza entre hombres, mujeres y en compañía de uno mismo. La diversidad de expresión está presente en cada momento y se busca romper esquemas, para atraer a las nuevas generaciones a una cultura que se relaciona con lo anticuado.
De esta manera, se fusionan la danza jazz y contemporánea para dar paso a Piantao. -Y me permito el comentario: Piantaos están estos artistas con la entrega escénica a cada segundo-. Si podés imaginarte un attitude seguido por un corte y una quebrada en una milonga rockeada, es por acá.
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