Hablar de la danza para la danza

Querida danza dos puntos de Emanuel Palavecino, son memorias del proceso de un trabajo escénico devenido en una colección de escenas con situaciones propias de ensayos al momento de llevar adelante una propuesta de danza.

¿De dónde partimos a la hora de crear una pieza de danza? ¿Son nuestras experiencias personales, alguna vivencia en particular, fracasos amorosos, ego, sólo metáforas dulces y románticas sobre nuestra concepción de la naturaleza?

Puede que sea todo eso y mucho más. Emanuel Palavecino, autor de Querida Danza Dos Puntos,  lo expone y transforma en un absurdo que nos hace reír, nos identifica y nos hace pensar sobre nuestra relación con la escena, el movimiento y la propia danza.

Paradójicamente, Querida Danza Dos Puntos tiene como recurso principal para su desarrollo en escena al texto y al diálogo, hechos confesiones directas al público sobre los ensayos y cómo se lleva adelante esta obra, desde su concepción, producción y explotación.

Por su parte, el movimiento toma un rol secundario y la danza parece ser ese mito que nunca se hará presente.

La puesta en escena no es ambiciosa, lo cual funciona para la decencia cómica que se lleva adelante. Cada individuo en esta obra narra su relación con esta pieza mediante una verdad exagerada de lo que sucede tras bambalinas. Los conflictos personales, la falta de ensayo y las ganas e intereses que los hacen estar en ese presente.

A pesar de todo el delirio esta propuesta termina por abrazar el movimiento y explicita en palabras la relación que muchos trabajadores tenemos con la danza.

Intepretes: Abril Lis Varela, Inés Maas, Juan Salvador. Mauro Podesta.

Querida Danza Dos puntos se presentará el 15 y 29 de julio, a las 20.00 hs en Estudio Viceversa, Gorriti 5839.