“Cuando Frank conoció a Carlitos”, un encuentro mágico entre dos leyendas

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Oscar Lajad, en el papel de Gardel, y Alan Madanes, como Sinatra. Ph: Carlos Furman.

El teatro Astral se convirtió en el escenario perfecto para un encuentro imaginario que trasciende el tiempo y el espacio: el cruce entre dos íconos de la música, Carlos Gardel y Frank Sinatra. “Cuando Frank conoció a Carlitos” es una obra que no solo rinde homenaje a dos figuras legendarias, sino que también celebra el tango y su profunda conexión con el alma porteña. Con un libreto escrito por Raúl López Rossi y Gustavo Manuel González, la pieza nos sumerge en un diálogo íntimo y emotivo entre un Gardel consagrado y un joven Sinatra, ávido por comprender la pasión que late en cada tango.

La obra es un viaje musical del repertorio gardeliano. Ph: Gustavo Gavotti.

La obra, que se extiende a lo largo de hora y media, es un viaje musical que recorre los clásicos más emblemáticos del repertorio gardeliano. Desde “Mi Buenos Aires querido” hasta “Volver”, cada canción es interpretada con una fidelidad y un respeto que emocionan. Oscar Lajad, en el papel de Gardel, y Alan Madanes, como Sinatra, no solo capturan las esencias de estos gigantes de la música, sino que también logran transmitir su carisma y su magnetismo. Las voces de ambos artistas son un regalo para los oídos, y su química en escena es palpable. Antonella Misenti, con su hermosa voz, completa el trío en algunos números, añadiendo un toque de delicadeza y profundidad a las interpretaciones.

La dirección de Natalia del Castillo es impecable. Logra mantener un ritmo fluido y dinámico, equilibrando los momentos de diálogo con las interpretaciones musicales. La coreografía de Victoria Pecollo, muy bien ejecutada por los bailarines Victoria Galoto y Ale Andrian, aporta un componente visual que enriquece la experiencia. Los arreglos musicales de Nico Posse son otro punto destacado, permitiendo que cada tango resuene con la fuerza y la nostalgia que merece.

Interpretes: Oscar Lajad, Alan Madanes y Antonella Misenti. Ph: Gustavo Gavotti.

La escenografía, diseñada por Gonzalo Córdoba Estévez y Julieta Kompel, es funcional y evocadora, transportando al público a un camarín donde el tiempo parece detenerse. El vestuario, a cargo de Analía Morales y Jorge López, refuerza la atmósfera de época, mientras que el diseño de iluminación de Ariel Gato Ponce y Leandro Fretes añade matices que potencian las emociones en cada escena.

El elenco completo, desde los músicos hasta los actores secundarios, demuestra un compromiso y una entrega que se siente en cada momento. La producción general, a cargo de Curioso Entertainment, y la producción ejecutiva de Laura Manganelli Zuviri y Nicolás Cavallero, han logrado un espectáculo de alta calidad que honra a sus protagonistas y al género que representan.

El público, numeroso y entusiasta, respondió con calurosos aplausos al final de cada número y, al concluir la obra, se puso de pie para ovacionar a los artistas. Este gesto no solo reconoce el talento y el esfuerzo de todos los involucrados, sino que también confirma que “Cuando Frank conoció a Carlitos” es una obra que toca el corazón y que deja una huella imborrable en quienes tienen la suerte de presenciarla.

El público se puso de pie para ovacionar a los artistas. Ph: Gustavo Gavotti.

En definitiva, esta obra es un regalo para los amantes del tango, de la música y del teatro. Un encuentro imaginario que, gracias a la magia del arte, se vuelve real y nos recuerda por qué Gardel y Sinatra siguen siendo, y seguirán siendo, eternos.

De miércoles a domingo a las 20 hs y sábado doble función 20 y 22 hs en el teatro Astral, Avenida Corrientes 1639, CABA.

Entradas en boletería del teatro y a través de Plateanet.

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Alicia Muñoz
Alicia Muñoz, Profesora Universitaria en Danza, dirige desde 1997 la colección Balletin Dance Didáctico “Compartiendo Ideas” de la editorial Balletin Dance. Publicó los libros “Cuerpos Amaestrados vs. Cuerpos Inteligentes”, “Caos o Planificación” y “La evaluación en la Danza, Mucho más que poner una nota” también publicó artículos pedagógicos y criticas de danza en diarios de Argentina, Brasil y Venezuela. La utilización de los centros de energía, como generadores del movimiento lo viene desarrollando desde la Escuela de Danza Jorge Donn y en las jornadas de actualización pedagógica presenciales o por e-learning, que dicta actualmente. Por su trayectoria artística y pedagógica ha recibido numerosas distinciones de entidades oficiales de Brasil y de Argentina.