La coreógrafa que integró la compañía de Pina Bausch regresa con una obra íntima donde padres e hijos danzan sus relaciones primarias en Paraíso Club.
Ocho años después de su estreno en el Museo de Arte Moderno, “Mi contundente situación” de Diana Szeinblum encuentra nueva vida en el espacio comunitario de Paraíso Club. La obra, que se presenta en Fundación Cazadores y propone un experimento coreográfico único: convertir las relaciones familiares en materia de danza.

Cuando lo privado se vuelve escénico
Szeinblum, formada en Alemania e integrante de la compañía FTS bajo la dirección artística de Pina Bausch, desarrolló una propuesta que desafía las convenciones del teatro-danza. Cuatro duplas familiares reales —padres con hijos, madres con hijos, hermanos— exploran físicamente sus vínculos afectivos frente al público.
“Mi hija y yo, mi mamá y yo, mis hijos mi hermano y yo, mi papá y yo”, resume la coreógrafa la estructura de una obra que funciona como arqueología emocional. Natalia Tencer danza con su padre Luis, Lucas Condro con su madre Susana Laurnagaray, Rodolfo Opazo con su hija Quío Garat Opazo más Vera Garat, mientras que los hermanos Rafael y Lorenzo Nir son dirigidos por la propia Szeinblum.

La memoria hecha movimiento
El procedimiento coreográfico de Szeinblum parte de un encuentro físico inicial entre los familiares, donde “el contacto revela capas de memoria, cuidado y transformación”. En una segunda instancia, los intérpretes improvisan a partir de lo que permanece de ese contacto, construyendo un territorio donde la danza opera como reveladora de vínculos invisibles.
La directora define su búsqueda como un intento de “volver a reunir aquello que alguna vez tuvo el valor de lo inseparable”, explorando “la materialidad humana como fuente desorganizada de saberes: aquello que fuimos antes del lenguaje y la organización de la razón”.

Un laboratorio escénico en crecimiento
Paraíso Club, el proyecto autogestivo que presenta un estreno mensual, encontró en Szeinblum una propuesta que dialoga con su filosofía comunitaria. El espacio, que funciona por membresías y convierte al público en coproductor de las obras, ofrece el marco ideal para una experiencia que borra las fronteras entre lo público y lo privado.
La obra cuenta con diseño sonoro y música en vivo de Macarena Aguilar Tau, diseño de luces de Adrián Grimozzi y colaboración artística de Eugenia Estevez y Asistencia de dirección de Damiana Poggi. La fotografía de Jazmín Tesone documenta un proceso que Szeinblum describe como búsqueda de “ensueños perdidos” y “restos enmudecidos”.

Linaje Bausch en Buenos Aires
La trayectoria de Szeinblum, con estudios en Alemania y paso por una de las compañías más influyentes del teatro-danza contemporáneo, se materializa en una obra que hereda la tradición bauschiana de explorar la intimidad humana desde la fisicalidad. Sus trabajos han circulado por festivales de América, Europa y Asia, consolidando un lenguaje personal que encuentra en las relaciones familiares un territorio coreográfico inexplorado.
Funciones: 5, 6, 8 y 9 de agosto a las 20 hs, y 10 de agosto a las 19 hs en Fundación Cazadores, Villarroel 1438, CABA.
Entradas disponibles en: https://paraisoclub.squarespace.com/