La compañía presenta una reinterpretación del tercer acto que incorpora bailarinas profesionales y amateurs de diferentes edades, cuestionando los criterios rígidos de forma y virtuosismo del ballet académico
El Ballet Nora Ponce se prepara para su participación en la Noche de los Museos con una propuesta que interroga los límites del ballet clásico como práctica inclusiva. La reinterpretación del tercer acto de “La Bayadera” que presentará en el Palacio Barolo incorpora bailarinas profesionales y amateurs de diversas edades y trayectorias, desafiando los modelos tradicionales de la danza académica vinculados históricamente a “criterios rígidos de forma, edad y virtuosismo”.
La operación que realiza Ponce no es simplemente pedagógica sino dramatúrgica: adaptar la coreografía original “respetando las posibilidades expresivas de cada integrante” mientras se sostienen “altos estándares de calidad artística y técnica”. Esta formulación revela la tensión productiva entre democratización del acceso y mantenimiento de la exigencia técnica, dilema permanente de toda propuesta que busque ampliar las bases sociales del ballet sin diluir sus especificidades expresivas.
El elenco integrado por diecisiete bailarinas —Mónica M. Arana, Carolina Araoz, Clara Beltrán, Camila Cerra, Sara Del Valle, Gabriela Franzoni, Analía Gerpe, Mariana Hess, Raquel A. Jácome Flores, Valentina Made, Julieta Marcellino, Fernanda Obispo, Ana Belén Olivencia, Isabel Padilla Rodríguez, Mercedes María Parera, Candela Riveros Bucatar y Lucía Stroppiana— evidencia una búsqueda de “diversidad escénica” que trasciende el discurso para materializarse en cuerpos concretos sobre el escenario.

La trayectoria de Nora G. Ponce como ex bailarina graduada en el Teatro Colón y Maestra del Método Vaganova seleccionada para el Boston Dean College le otorga credenciales académicas que legitiman su propuesta de transformación desde el interior mismo del sistema. Esta posición le permite operar no como outsider que rechaza la tradición sino como heredera que la reinterpreta desde nuevas coordenadas sociales.
La decisión de presentar la obra en el Palacio Barolo durante la Noche de los Museos añade una dimensión simbólica significativa. Este espacio arquitectónico inspirado en “La Divina Comedia” se convierte en marco que dialoga con la dimensión espiritual del tercer acto de “La Bayadera”, conocido como “El reino de las sombras”, donde las bayaderas muertas descienden al encuentro de Solor.
La compañía, que cuenta con tres años de trayectoria y ha presentado producciones como “Ballet Études” en el Centro Cultural Adán Buenosayres y el Centro Cultural San Martín, se posiciona como laboratorio de experimentación sobre las posibilidades del ballet como práctica inclusiva. Su pertenencia al Consejo Internacional de la Danza (CID-UNESCO) evidencia el reconocimiento institucional a una búsqueda que combina rigor técnico con apertura social.
La pregunta que plantea esta propuesta trasciende lo meramente técnico para adentrarse en territorio político: ¿puede el ballet clásico, arte históricamente asociado con élites sociales y cuerpos normalizados, transformarse en práctica democrática sin perder su especificidad expresiva? El Ballet Nora Ponce apuesta por una respuesta afirmativa, aunque el desafío será sostener esa tensión productiva entre apertura e identidad estilística.
Sábado 8 de noviembre a las 20:00, 21:00 y 22:00 hs en el Palacio Barolo, Av. de Mayo 1370, CABA.
Entrada: gratuita (Noche de los Museos).







