“El Lenguaje de los Pájaros” de Farid Uddin Attar, filósofo persa del siglo XII es quizás el poema místico más antiguo conocido en Occidente. En este tratado sufí, diferentes pájaros se reúnen para viajar juntos hacia el pájaro supremo; el Simorg, en busca de la felicidad del alma.
En “Habitar un pájaro” de Gustavo Friedenberg, un hombre mayor busca en los pájaros su lugar de pertenencia. El director se pregunta: “¿En qué radica su fascinación?” por las aves “¿Qué hace que un hombre deseche sus vínculos históricos y construya una nueva versión de sí mismo?” Quizás las aves voladoras, cuando nos espejan nuestra imposibilidad de surcar los cielos, nos ilusionan con hacerlo y nos remeten a una libertad que no tenemos en cuanto humanos.
La obra está inspirada en el cuento “La metamorfosis del Sr. López” del dramaturgo español Rubén Pérez Pombo (Premio Xuventude Crea 2015, Galicia). Nótese que el segundo apellido del autor quiere decir palomo en idioma gallego. El Sr. López lleva una vida común, gris se podría decir. Hasta que en un momento toma una decisión radical. Ir en busca del Simorg, de su viaje del alma. Así, simple, cotidiano, humano hasta el tuétano. Pero Friedenberg junto a su maravilloso equipo, a esos tonos de gris, los colorean con poesía de la mejor. Exploran las posibilidades del diálogo entre la danza, la actuación, los títeres y el teatro de objetos. Se podría pensar que se trata de una puesta en escena para el público infantil, y aunque no sea esa la propuesta, más de una persona de corta edad se encantaría con este espectáculo.
Los textos en castellano y gallego dichos con maestría por los tres intérpretes, conjugan con unas danzas flamencas resignificadas y que por veces son, al mismo tiempo, narración con objetos que transforman un símbolo en otro, reconstruyéndolo. También en el lenguaje dancístico los roles de género se intercambian en pos de contar alegrías y preguntas, encuentros y juegos, ensoñaciones. El arte flamenco de a ratos fusionado con otros lenguajes corporales sorprende y al mismo tiempo recuerda que los cuerpos viejos bailan. Bailan y se cuestionan, bailan y juegan, bailan y cuentan de sus vivencias, bailan y se transforman, bailan y tienen alas.
Dice Friedenberg: “Decidí trabajar con títeres porque siempre me resultaron fascinantes; son muy parecidos a nosotros, pero no del todo, y esta casi humanidad los hace profundamente inquietantes, dando vida a un mundo que se parece al nuestro, pero que, sin dudas, es de un orden tan mágico como misterioso. Eso es para mí el teatro.”
En “Habitar un Pájaro” el director abre otro juego, como el Sr. López, quien con su ropa gris, como su pueblo, como su casa, su propia existencia, empieza a avistar las aves y a jugar (¿bailar?) con ellas. A través de la acertadísima escenografía y de los preciosos vestuarios, los intérpretes y los sorprendentes títeres cuentan un cuento gris que se va tiñendo de los colores ya existentes en el alma del Sr. López. Este cuento teatral cuestiona los roles asignados, el prejuicio con el envejecimiento, los mandatos. Nos sugiere que la vejez, la jubilación, pueden ser la oportunidad para otra vida, para una nueva historia y que nuestra tribu puede ser otra.
Es sabido que los pájaros bailan sus danzas de apareamiento. Así surge la pregunta de si ¿Hay edad para bailar? ¿Hay edad para jugar? ¿Hay edad para cambiar? Parece que Gustavo Friedenberg y Rubén Pérez Pombo opinan que no. Si como en Farid Uddin Attar, los pájaros son símbolos de las almas, en “Habitar un Pájaro” contra todo pronóstico, el alma de un señor viejo y gris, vuela, bailando con sus compañeros alados.
“Habitar un pájaro (o La metamorfosis del Sr. López)” ha sido ganadora del Programa Iberescena en la línea de coproducción internacional. Las próximas funciones serán los jueves de septiembre, a las 20:30 hs, es la sala Solidaridad del Centro Cultural de la Cooperación: Avenida Corrientes 1543. Localidades disponibles en boletería del teatro o en Alternativa Teatral.
Ficha técnica
- Dirección general y coreográfica: Gustavo Friedenberg
- Dirección de títeres: Daniela Fiorentino y Gustavo Friedenberg
- Asistencia de dirección general y coreográfica: Mónica Romero
- Intérpretes: Daniela Fiorentino, Eliana Pereira Rejala y Gustavo Friedenberg
- Asistencia general: Ícaro Puig Mujica (Uruguay)
- Realización de títeres: Alejandra Farley
- Diseño escenográfico: Gabriella Gerdelics
- Diseño de Vestuario: Gabriella Gerdelics
- Música original: David Alonso Garzón (España) y Carlos Britez (Argentina)
- Diseño de luces: Ricardo Sica
- Diseño e identidad visual: Elena Centelles Vázquez (España)
- Comunicación y prensa: Cecilia Gamboa
- Producción audiovisual: Brian Rodríguez Cortiñas (España)
- Dramaturgia: Gustavo Friedenberg y Rubén Pérez Pombo (España)
- Producción general: Animales Danza Teatro