Una vez más el Consejo Argentino de la Danza (CAD) reunió a los artistas de Terpsícore, para conmemorar el Día Internacional de la Danza (29 de abril). La fecha fue instituida internacionalmente en 1982, por ser el nacimiento del reconocido investigador, maestro y coreógrafo del ballet, Jean-Georges Noverre (1727-1810).
Noverre es considerado el precursor del ballet moderno, es decir de la disciplina tal como la conocemos hoy. Creó el ballet de acción y a partir de sus reformas poco después vio la luz el ballet romántico. Trabajó en Francia (su país natal), Alemania, Inglaterra y Austria, protegido por reyes y reinas. Escribió varios libros y tratados que todavía hoy resultan interesantes para todo aquel que se dedique al ballet. Sin dudas sus “Lettres sur la danse” (Cartas sobre la Danza y el Ballet, 1760) es el más trascendente, traducido a cantidad de idiomas, sienta las bases de su teoría a modo de consejos.
Pero volvamos a Buenos Aires en 2024, cuando el miércoles 24 de abril, la comunidad toda de la danza porteña, volvió a reunirse convocados por el Consejo Argentino de la Danza, este año en el Teatro Regio. El acto comenzó con la presencia en el escenario de todos los bailarines participantes, junto a Natalia Alvarez (presidenta del CAD), Graciela Sarachu (vicepresidenta), Mónica Hidalgo (secretaria) y Rolando Alvar (locución). Como es costumbre, Alvar leyó el mensaje encomendado por el Comité de Danza del Consejo Internacional del Teatro (ITI-UNESCO), que este año fue nada más y nada menos que para la multipremiada bailarina argentina Marianela Nuñez (Royal Ballet de Londres). Con la misma sensibilidad que muestra al bailar, Marianela resaltó: “Estoy junto a ustedes en el compromiso de rescatar y revitalizar la historia de maestros, artistas y coreógrafos que han enriquecido el mundo de la danza, merecedores de ser escuchados por las generaciones venideras. Que sepamos todos que no somos espectadores, sino herederos de una tradición forjada con arte, dignidad y sacrificio, nutriendo nuestro camino con vocación y amor por la belleza. Si bien el futuro y el presente acaparan nuestra atención, sin el sólido cimiento del pasado, sin la fertilidad de nuestra tierra, el árbol de la danza no puede florecer. Las raíces son tradición y a la vez… nutrientes.”
A continuación, Natalia Álvarez agradeció a los artistas intervinientes por su desinteresada colaboración y Rolando Alvar leyó las palabras comisionadas por el CAD al maestro de ballet argentino, Alejandro Totto, quien resaltó la importancia y reconocimiento a sus maestros.
La danza comenzó con la participación de los primeros bailarines del Teatro Colón que dirige Mario Galizzi, Lola Múgica y Jiva Velázquez en el dúo “Cour d’amours” de “Carmina Burana” de Mauricio Wainrot (con música de Carl Orff), quienes pusieron su técnica y expresividad al servicio de la obra.
Anandini Dasi, brindó una exquisita interpretación de “Moksha” danza tradicional de la India, sobre partituras de Padma Vibhushan Guru Sri Kelucharan.
El Ballet del Teatro San Martín, dirigido por Andrea Chinetti y Diego Poblete, presentó un fragmento de “El Eco de las manos” coreografía de Nicolás Berrueta (con música de Claudio Martín y diseño de iluminación de Alberto Lemme). Se trata de una obra potente y vibrante que fue interpretada magníficamente por Benjamín Lameiro, Juan Camargo, Jonas Grassi, Alejo Herrera, Vicente Manzoni, Matías Coria, Camila Arechavaleta, Manuela Suarez Poch, Eliana Picallo, Ivana Santaella, Andrea Pollini y Paula Ferraris.
El tango se hizo presente con “Gallo Ciego” coreografiado por los propios intérpretes: Ayelén Morando y Sebastián Martínez (música de Osvaldo Pugliese), que expusieron su dominio técnico al servicio de la pieza.
Caterina Graziani, muy expresiva y bien secundada por Jerónimo Mitre Mercuri, del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón (ISA), brindaron “La Sylphide” del ballet “Baile de graduados”, coreografía de David Lichine con música de Johann Strauss, dirección de Sabrina Streiff, siendo sus maestros preparadores Marcelo Antelo y Victoria Lanestosa.
La danza española se vio representada por la Sociedad Parroquial Vedra, que a través de la “Jota” de Santo Andre das Nogais-Vilavexe, la “Muñeira” de Piñeira do Caruel y “Pasodoble Tiruleque” mantuvieron viva la tradición, con alegría y avezado despliegue. Sus bailarines: Andrea Zas García, Camila Manfredi de la Fuente, Juan Manuel Naval, Julia Echeverría Suarez, Julieta Geuna, Macarena Povor, María Belén Naval, María del Rosario Vera Peñaloza, Mariana Álvarez Flores, Muriel González, Pía Tolosa y Valeria Belén Zas García. Sus músicos: Ariel Álvarez, Sergio Fragoso, Thais A. Gil Ares, Pablo Manuel López Pereira y Edith Analía Álvarez.
El Ballet del Sur bajo la dirección de Luis Miguel Zuñiga, presentó el Gran Pas de deux del segundo acto de “Giselle”. Antonella Silva (Giselle) y Boris Zambrano Melo (Albretch), expusieron su interpretación de este clásico del romanticismo de Marius Petipa-Adolphe Adam, con reposición de Edgardo Trabalón.
Hernán Piquín y Soledad Mangia, presentaron “Adiós Nonino” de Astor Piazzola, con coreografía de Piquín. Y como dice el refrán: “lo breve y bueno dos veces bueno”. El bailarín argentino regresa a su patria para continuar deleitando al público con su expresividad y pericia, al igual que su compañera.
El Ballet Folklórico Nacional, bajo la dirección de Glenda Casaretto y Fernando Muñoz, tuvo a su cargo el cierre de esta gala, con las tres partes de “Cuando sale el sol” (Cuando sale el sol, Mi nieto Ignacio y Polca criolla). Fueron sus asistentes coreográficos Soledad Buss y Juan Paulo Horvath, música de Los Nuñez, diseño de luces de Gustavo Trinidad, vestuario de Jimena Visetti Herrera.
Con un estilo coreográfico más moderno que tradicional, el BFN se destacó (como es habitual), por ese gran sentido de grupo a disposición de la obra, la calidad expresiva y un alto nivel técnico de todos sus bailarines: Barbatto Carolina, Castaño Sabrina, Contreras Bárbara, Diz Soledad, Fabretti Romina, Ferreyra Graciela, Italiano María Belén, Italiano María Celeste, López Nerina, Mazacotte Cándida, Moar Ángeles, Ponce de León Gabriela, Ramírez Celeste, Rea Marina, Regiardo Mariángeles, Torres Candelaria, Torres Constanza, Vigil Agustina, Visetti Herrera Jimena, Bojko Leandro, Bogado Alexis, Colomba Rodrigo, Lazarte Jonathan, Ledesma Alexis, López Esequiel, López Hernán, Pacheco Sergio, Ribalta Alfredo, Rivero Gonzalo ,Rodríguez Matías, Santucho Federico, Sosa Darío, Vattimo Cristian, Verges Adrián y Visetti Juan Manuel.
Fue una Gala encantadora, que además de permitir el lucimiento de todos los bailarines en escena, logró ese reencuentro fraternal y amistoso en platea, de todos los que forman parte del mundo de la danza. Desde hace unos cuantos años, esta es una cita que nadie quiere dejar pasar.