Antonio Najarro, ex director de Ballet Nacional de España y gran apasionado por la danza española, llega nuevamente a Buenos Aires, esta vez al frente de su propia compañía. El coreógrafo, director y bailarín español presentará Querencia, en el Teatro Coliseo, una obra que busca dar visibilidad y prestigio a todos los estilos de esta danza. Aseguró que hay que estar un “poco loco” para hacer esto, pero a la vez siente una gran responsabilidad de presentar a la danza española en toda su excelencia. Entre ensayos, clases y homenajes, dialogó con Balletin Dance.
Hay una necesidad suya de poner en valor la danza española, tanto lo bolero, lo estilizado, el folklore, el flamenco…. ¿Por qué?
Porque eso nace de mi propia preparación como bailarín. He sido un intérprete muy versátil, siempre me ha gustado, he intentado que los maestros y los coreógrafos me pusieran a bailar todo, escuela bolera como danza estilizada. Y, a partir de allí, cuando creé mi compañía en 2000, el estilo que me ha caracterizado es la danza estilizada. Es lo que más he exportado. Y siempre tuve que buscar muchas estrategias para romper esa barrera de que la danza española se conoce solo como flamenco. Siempre luché a nivel comercial y de contenido para romper esas creencias y que el público conozca la danza española en todos los estilos.
Mi lucha ha surgido primero en la creación que más me caracteriza, la danza estilizada, y que el contenido principal de la compañía fuera ese. Luego, tenía que venderlo en todo el mundo y me vi obligado en ejercer una estrategia de comunicación, para que el mundo sepa que la danza española es algo más que el flamenco.
Hay en la actualidad una saturación en este mercado de lo flamenco y por momento todo se ve igual…. ¿Es así?
(Risas)… Es cierto que, en un determinado nivel, un estándar medio podría decir que lo hay. Pero, en un grado de excelencia, es verdad que ahora mismo los grandes artistas que tienen un nombre poseen una personalidad marcada, y sus propuestas son muy de sello distintivo. Es verdad que están presentando mucho flamenco, lo cual me encanta, pero lo que quiero es que se compare y se incluya a la exhibición otros estilos de la danza española.
¿Por qué considera que perdió popularidad la danza española?
No aseguro que solo por lo que te voy a decir, pero creo que una de las cosas que, por experiencia propia, es que suele ser muy complicado tener una compañía privada de formato mediano o grande, que prácticamente no las hay. Luego viajar con tu maestra repetidora, encontrar los espacios para que cada día se pueda hacer la clase de ballet, clase de castañuelas y todo el trabajo técnico que hay detrás de todo esto. Vestir un espectáculo de danza española es muy costoso. Componer una música sinfónica de nueva creación… hacer eso es un poco de locos, yo estoy un poco loco, y me siento responsable de presentar la danza española en toda su excelencia y lo quiero hacer. No voy a decir con esto que al llevar flamenco no haya que hacer un trabajo. Pero es cierto que la infraestructura de bailes numerosos para presentar coreografías de danzas españolas es muy difícil, y yo creo, que eso es una de las cosas que hace que no se la vea con tanta frecuencia.
Por momento la danza española tiene un público adulto y no se llega a los jóvenes. ¿Se plantea, de alguna manera de atraer a los jóvenes o renovar el público?
Yo llevo muchos años obsesionado con rejuvenecer el público que acude a la danza española. Con el Ballet Nacional de España lo conseguimos y mucho. Hicimos infinitas actividades pedagógicas, visitas a colegios, lanzamos el primer proyecto pedagógico. Fuimos a escuelas e inicialmente hicimos una serie de test a los niños para explicar qué era la danza española para que la conozcan, se le llevó zapatos y castañuelas, luego vinieron a ver ensayos en el ballet nacional unos 2000 niños. Después asistieron a funciones familiares del ballet, arrastraron a sus padres, y el resultado fue maravilloso.
Con mi compañía, somos residentes del Municipio Pozuelo de Alarcón, en Madrid, y visitamos colegios continuamente, yo doy conferencia para niños, y el libro de danza española para niños y un video juego…. Yo todo lo que hago con mi compañía intento que tenga un atractivo más joven, a nivel de diseño de cartelería, y del propio espectáculo…
¿Creés que para bailar danzas españolas hay que ser español?
No. Pero hay algo que si es cierto que el máximo nivel de enseñanza está en España. Desgraciadamente, a mí me encantaría que haya un máximo nivel de enseñanza en todo el mundo, porque hay muchísima afición. Cuando hablo de danza española me refiero a todos los estilos, porque el flamenco sí está más evolucionado.
En una nota del diario La Nación hace unos días usted comentaba que “los mejores bailarines están en España..”
Los artistas más completos de danza española, sí. Ahora mismo, yo no he encontrado fuera de mi país, con el nivel que requiero para bailar en mí compañía.
¿Conoce bailarines de danza española en otros países?
Sí, claro, de hecho ahora he coreografiado la ópera Ainadamar, que se presentó en diferentes países y es complejo encontrar bailarines preparados en todas las disciplinas.
Combina su carrera como director, coreógrafo y bailarín y también realiza obras para patín o nado sincronizado… ¿Cómo hace para dividirse y llevar una agenda con tantas propuestas diversas?
No paro, porque me gusta mucho. Lo paso muy bien y me encanta hacerlo. A parte de todo eso, también voy a coreografiar para el diseñador de moda Oteiza y a finales de año para una propuesta de la fundación Juan March sobre la recuperación de un trabajo de La Argentina [Antonia Mercé]. Tengo muchos proyectos porque me encanta. Con este afán de darle visibilidad a la danza española no temo a meterme en otros terrenos siempre en pro de mostrar la danza española y llegar a otros públicos.
¿Cómo fue la experiencia de montar la coreografiar para la obra la Romería de los Cornudos, una puesta que fue recuperada de 1933 de García Lorca y Rivas Cherif que se realizó en la fundación Juan March en 2018? ¿Qué elementos utilizó para hacer una coreografía ya que no hay registros de danza de ese tiempo?
Ahora el proyecto que voy a acometer es exactamente lo mismo. La Argentina en París, hay una partitura que se ha llevado a piano y voy a incluir dos instrumentos violoncellos y a José Luis Montón en la guitarra. Eso va a ser el formato musical y tenemos a la Fundación Juan March que hace un trabajo increíble de búsqueda, investigación de documentos. Tenemos programas de mano, notas de periódicos, diseño de figurines, diseño de telones originales y un guion. Pero no contamos con algo audiovisual. Yo me voy a basar en el original y haré con un pequeño ballet porque no se puede realizar con una gran compañía, no caben 20 bailarines allí. Y tomaré las fotos de la Argentina, cómo iba vestida y sus poses y a partir de allí voy a crear mi universo. Me dan absoluta libertad, se respetará la época, pero presentándolo en la forma de bailar de hoy. No voy a hacer una imitación de la Argentina, sino a realizar un ballet y una coreografía que se inspirarán en ese material del cual disponemos.