Avanza la reapertura de escuelas de danza en todo el país

En la Argentina, es cada municipio quien define el protocolo de actuación para prevenir contagios en las diferentes actividades de la comunidad. De acuerdo a la realidad se solicita a las autoridades provinciales (y luego a la nacional) la posibilidad de abrir diferentes sectores económicos.

En cuanto a los estudios/academias de danza, son muchas ciudades las que han comenzado a trabajar, con ciertas diferencias menores en cuanto a la actividad. También serán los municipios los encargados de controlar que las medidas de seguridad e higiene se lleven a cabo correctamente.

En la provincia de Catamarca, que según datos oficiales no contabiliza ni un contagiado ni un muerto por coronavirus, también comenzó la actividad en las academias de danza privadas. Los mismos dueños de los estudios de danza (representados por Oscar Pérez y Ana Claudia Vergara) habían elaborado diferentes formulismos, que además de las medidas conocidas (distanciamiento, higiene y desinfección, cupos reducidos) incorpora asegurar que no podrá haber ningún contacto físico entre bailarines.

La Municipalidad de Gualeguaychú, Entre Ríos (donde no ha habido ningún muerto confirmado oficialmente a causa del coronavirus), sigue los pasos de la ciudad de Colón, en la misma provincia. Están terminando de diseñar los protocolos de variadas actividades deportivas, gimnasios, academias de danza, talleres y centros culturales (entre otros), para presentar al COES local (Comité Operativo de Emergencia Sanitaria) y se pueda retomar la actividad.

Igual que en todas las ciudades se solicita a las personas responsabilidad con respecto a sus prácticas y maneras de comportarse en los momentos en que coincidan con otros ciudadanos, conservando todas las medidas de seguridad e higiene para evitar contagiarse.

En la provincia de Neuquén también comenzó la actividad en los estudios de danza privados y en los talleres públicos. Aquí se contempla la reserva de turnos previos (para no sobrepasar la capacidad permitida de asistentes). El gobernador Omar Gutiérrez, pidió a la ciudadanía cuidar el estatus sanitario actual obrando responsablemente. Dijo que, cada actividad que se habilita tiene un seguimiento y en la medida en que se cumpla con los protocolos se podrán ir ampliando. “Si los resultados son positivos, se podría ir incorporando secuencialmente un día por semana”, estimó.

Por otro lado, el mundo de los espectáculos en vivo, se encuentra en la misma situación heterogénea, que se modifica de acuerdo a la realidad de cada localidad.

En una reunión virtual realizada entre autoridades del Instituto Nacional del Teatro (INT) y la Asociación Profesional de Productores Ejecutivos de las Artes Escénicas (APPEAE), se habló de la necesidad de conocer cuáles son (y serán) las condiciones laborales de los trabajadores del sector en las distintas regiones del país. “Conversamos sobre la posibilidad de que el Instituto Nacional del Teatro pudiese colaborar con nosotros a corto plazo en la difusión a través de las distintas Representaciones Provinciales y de los canales que considere del primer Relevamiento Nacional a Productoras y Productores Ejecutivos de las Artes Escénicas y de sus Proyectos/Espectáculos frente al COVID- 19”, dijo Gustavo Schraier (APPEAE).

Sería ideal que desde el Ministerio de Cultura de la Nación, se contribuya a conocer el protocolo recomendado para estudios de danza y salas teatrales, confección de gráficas (afiches que pudieran pegarse en las paredes de estos espacios), y charlas de capacitación, para dueños de establecimientos, docentes, coreógrafos, alumnos, bailarines y actores.

Con tiempo para prepararse correctamente, habrá mayores posibilidades de que las cosas salgan bien. Seguramente muchos espacios requieran realizar alguna reforma edilicia, o modificación de los salones, vestuarios y oficinas.

Pero son los mismos interesados del sector (de todo el país) que una vez más se alzan con la necesidad, y encuentran la solución: están realizando encuentros virtuales, para intercambiar información sobre posibles protocolos y modos de operar.

Como en el resto del mundo, la actividad cultural volverá a existir. Y qué mejor que hacerlo con el mayor de los cuidados y responsabilidad de todos los involucrados, para garantizar que las clases de los profesores de danza, no sean peligrosas y puedan desarrollarse como han sido desde siempre: llenas de amor y pasión por la profesión.

Ojalá no tengamos que retroceder por algún rebrote como sucedió ya en varios países de Europa.