A salas llenas, sesionó el primer Festival Internacional de Cine de los Países del Sur del Mundo (Ficsur). Organizado por el Grupo Octubre, tuvo como sede principal la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (Umet) de la ciudad de Buenos Aires, del 1 al 8 de julio

El festival se inauguró con el drama musical brasileño Elis (2016) de Hugo Prata. La presentación oficial fue engalanada por el encanto de las actrices brasileñas Sonia Braga, madrina del evento, y Andreia Horta, protagonista del citado filme. La clausura fue con otra cinta dedicada a un popular género musical bailable, Alta Cumbia (2014) del argentino Cristian Jure.

Referido al baile patrimonial, y más universal, del Río de la Plata pudo verse el documental Tango Negro (2013), una singular investigación sobre sus orígenes, del cineasta angolano Dom Pedro que fue presentado en la sección paralela Francia presenta África.

Balletin Dance tuvo el placer de dialogar con la presidenta del Ficsur, la bailarina, coreógrafa, guionista y cineasta Paula de Luque, quien destacó la nutrida presencia de obras internacionales de altísima calidad y el carácter gratuito que revistió al festival. Y expresó: “Trato de imprimir mi ideología y mi espíritu a cuanto hago, creo que es una obligación que el buen arte, la cultura y la educación sean accesibles a todos por igual”.

De Luque fue presidenta-fundadora del Festival de Cine de la Unasur (acunado por la provincia de San Juan, de 2012 a 2014). “El festival que me recuerdas, fue superado ampliamente por éste (Ficsur), aunque también mantenemos esa premisa de ‘una mirada del Sur hecha desde el Sur’, buscando una sólida y verdadera unión regional dentro de nuestra diversidad (factor que consideramos más trascendental), más allá de los rasgos en común que tenemos”.

Perteneciente a la generación fundadora del Videodanza en Argentina, con El Territorio (1996), la entrevistada resaltó la marcada presencia femenina en este mega evento, a la vez de vislumbrar un posible premio para este rubro, del cual fue pionera en los años ‘90, junto a Silvina Szperling, Melanie Alfie y Margarita Bali. Para la próxima edición, valora incluir también la temática infantil, una señal de televisión y se plantea la búsqueda de un mercado natural. Dentro del mundo del arte, el cine ha sido una industria desde sus inicios y “es una herramienta estratégica para la conformación de nuevas industrias culturales”. Así remarcó esta polifacética artista que gusta de soñar y compartir sus sueños hechos realidad.

Ante la última pregunta ¿Extraña bailar?, confiesa emocionada: “Definitivamente sí. Todos los días bailo un poquito, en el living de casa, con mi novio”.


“Uno de mis próximos proyectos es un poema visual sobre la obra de Oscar Araiz”, confiesa Paula de Luque


Sedes

En sólo una semana se superpusieron seminarios, encuentros, charlas, clases magistrales y se rodaron unas cien obras, de la más reciente filmografía, de 32 países de Sudamérica, África y Oceanía. Se proyectaron en el Museo Nacional de la Historia del Traje (Chile 832), la Alianza Francesa (Av. Córdoba 946) y el Cine  Gaumont (Av. Rivadavia 1635), con entrada libre y gratuita; mientras que en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Av. Figueroa Alcorta 3415), tuvo entradas promocionales.

Artículo anteriorDanza Germánica
Artículo siguienteDanzar por la Paz
Toni Más (La Habana) Instructor de arte, Narrador Oral Escénico e investigador de la música popular cubana. Ha publicado los poemarios Tono Menor, Editorial Letras Cubanas (2002), premio del concurso Pinos Nuevos y Los fantasmas del circo, edición bilingüe inglés-español, Editorial Lugus Publications en Ontario, Canadá (1996). Textos suyos aparecen en diversas antologías y publicaciones periódicas en Cuba, España, México y Argentina.